El gato se va de marcha II (El Look final)

    Hola, hola. Para las que no sepáis de que va el post y se hayan quedado a cuadros al ver a una "chinita" o "geisha" en la foto, la explicación o la parte I está aquí. Bueno, pues ahora que ya estamos tod@s al día, paso a narraros la odisea que me hicieron vivir ese día.

   De toda la vida es sabido que las comparaciones son odiosas. Pero si a una comparación desafortunada le sumamos una maravillosa jovencita que no se está quieta ni a la de tres, pues obtenemos unas ganas de salir corriendo que ni para que te cuento... El caso es que al estar aplicando la base blanca para luego difuminarla, viene mi marido y no se le ocurre otra cosa que exclamar "¡Pero qué le estás haciendo! Parece la china esta, la de la película, la que te llamaban y luego te morías" (Sí, la del Grito, justo la de la imagen que ves más abajo). Ante semejante afirmación, lo que vino después es de imaginar. Creo que se levantó más de 20 veces para verse en el espejo. Vamos, las condiciones idóneas para maquillar...

   No sin gran esfuerzo, logré echarlo del lugar y seguir mi trabajo. Pero justo cuando comenzaba a aplicar el rojo en la cuenca del ojo, allí estaba de nuevo mi amado esposo cual mosca cojonera para volver a preguntar que es lo que le hacía a la pobre niña. Adriana, ya casi fuera de sí decía: "Parezco una Drag Queen, parezco una Drag Queen"... Con mis habilidades de negociadora, seguí mi trabajo. Hasta que finalmente conseguí unas palabras amables de mi churri (eso sí, cuando ya había terminado con los ojos). Pero la enana siguió traumatizada, porque hasta que no terminé del todo no dejaba de repetir que parecía una Drag Queen. Eso sí, una vez peinada, vestida y unas cuantas fotos después comenzó a sentirse un poco más satisfecha del disfraz.

Si alguna quiere saber como lo hice ahí va el paso a paso:

♣ En primer lugar apliqué una base blanca con una mofeta, ya que quería conseguir un acabado más parecido a geisha y no a payaso. Una vez que apliqué toda la base, la igualé con una esponjita.

♣ Con la ayuda de una borla para polvos, apliqué unos polvos translúcidos, concretamente los de essence.

♣ La prebase de sombras que usé fue la Primer Potion de Urban Decay.

♣ Usando una brocha de difuminar y una sombra roja intensa comencé a pintar la cuenca del ojo desde el interior y fui trabajando poco a poco hasta llegar al exterior, donde bajé con una línea diagonal para formar una especie de triángulo exterior.

♣ Con la ayuda de una brocha plana y una sombra amarillo canario, pinté el tercio del lacrimal del párpado móvil.

♣ El resto del párpado móvil lo pinté con una brocha plana y una sombra dorada.

♣ El resto del ojo lo he maquillado con una brocha de difuminar y una sombra del mismo tono que la "piel" (en este caso del color de la base).

♣ Con una brocha en ángulo y la sombra roja que he usado en la banana, he trazado la línea inferior de las pestañas.

♣ Usando pegamento para pestañas y una brocha plana, he pintado medio párpado móvil a partir del lacrimal. Sobre el pegamento he aplicado purpurina amarilla.

♣ Con un eyeliner en gel negro intenso (en este caso el de essence) he trazado tanto la línea superior como la inferior de las pestañas (pero sólo la exterior). Trataba de trazar una línea un poco más fina, pero claro si la muchacha no paraba de mover los ojos, pues tuve que apurar un poco para no comenzar de nuevo.

♣ La máscara de pestañas que he escogido ha sido la Ladies de Deliplús

♣ El blush lo he aplicado con la ayuda de una brocha en ángulo para rostro y la misma sombra roja con la que pinté la banana. Realicé una línea por el lateral y luego la difuminé con una brocha de colorete. (Ahí volvió a decir mi marido ¡Qué le estás haciendo! a lo que yo pensé Fus, fus).

♣Los labios los he delineado y rellenado con un perfilador rojo y los he repasado con un pintalabios del mismo tono.

 Por cierto, si alguna vez os van a aplicar purpurina en los ojos, os ponen pegamento para pestañas y os dicen "No abras los ojos" ¡No los abras!, porque entonces pasará lo siguiente: La persona se habrá dado la vuelta y cuando vuelva a mirarte tú le dirás: "Siento los ojos como cartón", y entonces comprenderás que los párpados se te han pegado. Pero eso ya es otra historia.